[SAMUEL MANTILLA] La medición y valoración de la doble materialidad es el mayor desafío que enfrentan los entornos contables para ofrecer respuestas creíbles relacionadas con la sostenibilidad y el cambio climático.
Para llegar a soluciones efectivas ampliamente aceptadas y comparables, se hace necesario realizar cambios de fondo a las perspectivas conceptual, legal y regulatoria subyacentes a la materialidad.
De lo tradicional debe evolucionarse hacia lo que ahora es importante: desde un concepto unidimensional hacia uno multidimensional que transforme los actuales fundamentos legales y regulatorios y que respalde prácticas empresariales y profesionales consistentes.
Mientras no se tenga un ‘enfoque universalmente aceptado’ de la materialidad, difícilmente estas cosas avanzarán hacia soluciones realmente efectivas porque cada uno defenderá su ‘entendimiento profesional’, en realidad, su actividad de negocios.