Doble materialidad: financiera y del impacto

[SAMUEL MANTILLA] La medición y valoración de la doble materialidad es el mayor desafío que enfrentan los entornos contables para ofrecer respuestas creíbles relacionadas con la sostenibilidad y el cambio climático.

Para llegar a soluciones efectivas ampliamente aceptadas y comparables, se hace necesario realizar cambios de fondo a las perspectivas conceptual, legal y regulatoria subyacentes a la materialidad.

De lo tradicional debe evolucionarse hacia lo que ahora es importante: desde un concepto unidimensional hacia uno multidimensional que transforme los actuales fundamentos legales y regulatorios y que respalde prácticas empresariales y profesionales consistentes.

Mientras no se tenga un ‘enfoque universalmente aceptado’ de la materialidad, difícilmente estas cosas avanzarán hacia soluciones realmente efectivas porque cada uno defenderá su ‘entendimiento profesional’, en realidad, su actividad de negocios.

Estados financieros de la Fundación IFRS

[JOHN HUGHES] La Fundación IFRS recientemente emitió su 2023 Annual Report,[Reporte anual 2023] titulado Better information for better decisions [Mejor información para mejores decisiones].

En este artículo se analizan algunas partes del reporte del auditor.

Todas las cosas fascinantes, pero ¿hay algo en la situación de la Fundación IFRS que sugiera el tipo de “llamada cercana” en la que podría esperarse tal revelación extendida? Si es así, tal vez debería haber sido más precisamente explicada; si no, ¿tal elaboración de lo “inverosímil” no constituye la temida sobrecarga de revelación? Pero de nuevo, solo estoy preguntando. ¡Y agradezco la oportunidad de preguntar!

Readaptación, ¿para qué?

[SAMUEL MANTILLA] La convergencia será real cuando se adopten los estándares y las prácticas internacionales. Esto es, cuando se dé prelación a la calidad informativa de los reportes por encima de las normas que los constriñen. Para efectos de la toma de decisiones empresariales.
Todo parece indicar que tal convergencia ya no es objetivo del Estado y que cada entidad hace su propia interpretación. La ley 1314 de 2009 se está convirtiendo en letra muerta en la maraña de normas y regulaciones que se expiden, pero que no se aplican.
La profesión contable colombiana (y latinoamericana) ha sido renuente a la adopción. Corregir el rumbo perdido hacia la convergencia es posible, pero necesita la adopción de los estándares y las prácticas internacionales. No hacerlo es abandonar las empresas y los mercados del presente y del futuro inmediato. Vacíos que serán llenados por otros profesionales (Contadores Inteligentes).