[SAMUEL MANTILLA] Una charla de Fintech me puso a reflexionar sobre el ahora rol secundario de la contabilidad y los estados financieros en la toma de decisiones, dado el tránsito que se está haciendo desde los sistemas de registro hacia los sistemas de acción.
A raíz de ello surge la siguiente pregunta: ¿Es posible un sistema de contabilidad financiera, funcional y exacto, que no necesariamente dependa de la partida doble?
En el presente, la contabilidad y los estados financieros ya no son la única fuente para la toma de decisiones (de inversión, regulación, impuestos…). Ahora hacen parte de conjuntos más amplios que condicionan y modifican su utilidad, conjuntos que continuarán evolucionando. Si ya no son la fuente única, ¿cómo se pueden destacar si hay otras fuentes de mayor valor?
